Me quiero referir al término de sexualidad sana como a la posibilidad de disfrutar de una actividad sexual y reproductiva gratificante, libre de prejuicios y machismos innecesarios.
Creo que para lograr este punto, los roles así como las creencias, actitudes y emociones personales de ambos sexos deben cambiar abismalmente, ya que muchas mujeres y hombres desconocen términos o productos importantes para mantener una buena relación y salud con su pareja.